La Paz: Necesidad y compromiso
En la actualidad las publicaciones sobre temas alicientes a la paz están en su mayor furor, no hay periódico, revista o blog en que no haya por lo menos un artículo tratando sobre este tema, y es muy atinente, la paz no es un asunto que tenga que ver con algún color político como muchos colombianos y colombianas lo vemos, la paz es hoy en día la transfusión para una nación que se desangra, en términos medio ambientales, la paz es la lluvia que necesita la tierra Colombiana durante este trágico fenómeno del Niño.
La paz es ahora una necesidad y hay muchas justificaciones de peso, una de ellas es porque desde que usted nació, desde que yo nací, no hay un día en que al encender el televisor o el radio, al leer el periódico, e incluso al escuchar a nuestros profesores, no se diga que hubo un ataque guerrillero o un ataque de las fuerzas armadas donde muy posiblemente hay muertos, tanto militares como guerrilleros y lo peor aún, los civiles que quedan bajo el fuego cruzado; a esto sumémosle algo más: Los atentados contra el medioambiente, esas voladuras a los oleoductos que es la típica forma como los grupos guerrilleros presionan al Estado, perjudican enormemente a nuestra flora, fauna y fuentes de agua, pensemos un segundo en los miles de compatriotas que a lo largo de estos años han tomado agua contaminada por el petróleo, o también que no han podido tomarla, allí en estos Departamentos como el Valle del Cauca, Chocó, Arauca, por no nombrar más, hay graves problemas de salud a causa de la guerra y del abandono del Estado a lo largo de los años.
Estos mínimos aspectos del conflicto me hacen pensar que la paz a través del dialogo es el único medio viable para que no haya más víctimas y problemas ambientales, y además, problemas económicos donde se ven afectados todos los sectores de la economía Colombiana, tanto el gran empresario como el microempresario.
No veo la guerra como una solución porque quienes van a combate son los hijos de las personas de escasos recursos, porque los que quedan en medio del fuego cruzado en mayor medida son los pueblos olvidados por el Estado, donde hay gente honrada, y, sobre todo, trabajadora, entonces, el sacrificio del diálogo es la garantía del principal derecho natural: La vida, la de miles de colombianos y colombianas. Llegar a la paz con el fin de los conflictos armados, sería afianzar cada vez más el artículo 11 de nuestra Constitución Política: “El derecho a la vida es inviolable. No habrá pena de muerte”.
Todo ciudadano Colombiano está comprometido, pues, con la búsqueda de la paz, aportando lo mejor de sí, ya sea desde los escritos, desde las acciones humanitarias, desde su estudio, y demás actividades, ya que así lo consagra nuestra Carta Política en su artículo 23: “La paz es un derecho y un deber de obligatorio cumplimiento”; ¿O es que se ha vuelto costumbre la guerra? Lo peor que nos podría pasar y está sucediendo, es la indiferencia y la poca sensibilidad de muchos sectores de la sociedad frente a los efectos del conflicto, esa indiferencia lleva detrás muchas vidas.
Finalmente, a pesar de nuestros diferentes puntos de vista sobre qué es la paz y como debería darse, debemos llegar a un común acuerdo, de allí que nosotros mismos alcancemos a vivir sin tanta zozobra, con más oportunidades, con verdadera justicia social y donde no tengamos una gran probabilidad de morir a causa del conflicto.
